Encaramos la bajada del Monte do Gozo. Nos cruzamos con numerosos peregrinos. Todos contentos, muy cansados pero felices, sabedores que en el final esta la recompensa.
Entramos en la Rua de San Lázaro y nos encontramos con la señal, que estamos en Santiago. Nos lo empezamos a creer. Lo que hemos hecho.
Seguimos por la Rua de San Lazaro y nos desviamos a mano izquierda, mas concretamente por la Rua do Valiño (en el barrio de Fontiñas). Ya empiezan a ser sus calles, familiares. Empalmamos con la Rua da Fonte dos Concheiros, cuya calle desemboca en la Rua de Berlin, donde el centro comercial (Area Central) de Santiago, se haya al final de esta calle. La atravesamos y bajamos por la Rua de San Pedro y entramos ya en la zona vieja, en la Rua das Casas Reais.
Un nudo en la garganta, miro a Virgi y esta llorando, de alegría. Porque también se llora de alegría. Y como dice Miguel Bose, los hombres también lloran y mucho. Os lo garantizo.
Continuamos deslizandonos por "nuestras" calles. Nos encontramos con mucha gente, pero nos da igual y ademas, estamos acostumbrados. Vamos despacio, muy despacio. Es como si el tiempo se haya detenido, congelado, petrificado. Queremos vivir el momento y lo estamos consiguiendo, estrecho la mano de Virgi y me mira, la miro, sonreímos. Felices muy felices.
Llegamos a la ultima calle, antes de la Plaza del Obradoiro, la Rua da Casas das Crechas, donde la piel de gallina se nos pone, al estar allí un gaitero.
Por fin, entramos en la Plaza del Obradoiro por el Hostal de los Reyes Católicos y nos dirigimos al centro de la Plaza, donde esta el final del Camino.
Hace unos 10 minutos que salió el sol por completo, para iluminar el momento.
Nuestra familia de Santiago está allí, esperando. Yo me abrazo completamente empapado en lagrimas con Angel y Virgi igual con Mari. Intercambiamos los saludos y allí están los peques donde los abrazamos y les damos un beso. Son nuestros nenes.
Y solo quedamos ella y yo, mi heroína. Nos abrazamos sin decir nada y ahora si, el mundo se ha paralizado.
LO HEMOS CONSEGUIDO !!!!!!!!!!!!!!!!!
Nos invade una sensación de alegría y de tristeza a la vez. Raro muy raro. Pero es así, estamos delante de una Catedral imponente, majestuosa, mágica y como no, deseada.
Después de aflorar nuestros sentimientos, queda recoger nuestro premio. La Compostela. Nos dirigimos para recogerla con nuestra credencial completamente sellada y queremos hacerlo vestidos completamente de ciclistas. Como no.
Y la tenemos, que placer y una parte como dijimos ayer, es vuestra. Que bonita.
Lo ultimo que queremos hacer, es agradecer. Un agradecimiento a algo. No tienen sentimientos porque es material, pero lo pongo en duda. No tienen corazón, pero laten. No tienen alma, pero fluye un áurea benigna por ellas. No tienen sentimientos, pero nosotros se los ponemos.......................SON NUESTRAS BICIS.
Gracias a ellas, estamos aquí. No las hemos nombrado en ningún momento y es gracias a ellas que cumplimos nuestro sueño.
G R A C I A S , os lo merecéis.